En el sector alimentario no debe pasarse por alto las directrices y protocolos actuales dedicados a la limpieza e higienización. De hecho, existen muchas enfermedades y envenenamientos transmitidos por los alimentos en todas las fases que intervienen en el procesamiento, el envasado, la distribución, el almacenamiento y la administración del sistema alimentario.

Todas estas etapas requieren una cuidadosa higienización y productos desinfectantes específicos para asegurar una adecuada higiene, también conocida como Seguridad Alimentaria, que garantice la protección de la manipulación de los alimentos.

La sanitización en el sector alimentario está regulada por la legislación de procedimientos HACCP para garantizar las condiciones higiénicas de los alimentos en todas las etapas de producción.

El procedimiento HACCP de la legislación alimentaria tiene como finalidad principal proteger la salud del consumidor y se basa en el análisis de riesgos para controlar el peligro de contaminación de carácter biológico, físico o químico, que pueda favorecer la transmisión de enfermedades.

De acuerdo con HACCP, los factores que influyen en la efectividad del proceso de sanitización son el tipo y concentración de germicida, el número y tipo de microorganismos, la duración de la exposición, el pH y la temperatura de la solución, la naturaleza de la superficie y la presencia de suciedad.

DURACION DE LOS PRODUCTOS EN EL SECTOR ALIMENTARIO

Desde la fase de selección hasta la llegada a la línea del supermercado: todos los productos alimenticios sufren una serie de alteraciones en lo externo/interno de sus características, debido a la modificación de las condiciones ambientales y físico-químicas-microbiológicas iniciales.

Las causas son de distinta índole, desde las propiedades físicas naturales del aire, hasta las propiedades intrínsecas de los alimentos: un producto que se está “echando a perder” produce etileno. El etileno, es la hormona natural del envejecimiento que activa de forma autónoma este proceso en los productos.

Además de las causas naturales y químicas, existen otras formas en que se pueden desencadenar las infecciones transmitidas por los alimentos, como la limpieza y desinfección inadecuadas del equipo de procesamiento de alimentos. La higiene inadecuada en el almacenamiento, los desinfectantes ineficaces y peligrosos también contribuyen a los riesgos químicos y biológicos.

AMIL Care PARA EL SECTOR ALIMENTARIO

Medisystem es la combinación de nuestros productos químicos ecológicos y dispositivos micronebulizadores automatizados de desinfección de alto nivel. La efectividad del sistema es posible a través de estándares certificables y protocolos replicables.

Nuestro sistema ha sido diseñado para limitar la intervención humana gracias a su tecnología automatizada “NO-TOUCH”. El objetivo es obtener superficies de primer contacto higienizadas reduciendo la recontaminación en los alimentos ​​sin alterar sus características de calidad y seguridad.

Medisystem permite lograr resultados de higienización de alta calidad, con una velocidad importante que no se encuentra en otras aplicaciones del mercado. No deja residuos, no es corrosivo y no deja olores desagradables y siempre en pleno cumplimiento con la normativa HACCP vigente.

Los productos químicos Sanibios (peróxido de hidrógeno) y Lytecare (ácido hipocloroso) son implementados y producidos por AMIL Care para obtener la máxima eficacia en la higienización, con el máximo respeto por el medio ambiente.

Gracias a nuestra patente internacional, los dispositivos saturan el área a un ritmo constante según el protocolo asignado. La acción de micronebulización automatizada es capaz de llegar incluso a las zonas más difíciles de alcanzar.

Nuestros equipos automatizados pueden tratar áreas de 10 a 5 000 m3 (de 350 a 175 000 ft3) como Teknobios y de 10 a 10 000 m3 (350 000 ft3) como Maxibios.